Marquelia

Localización: Este municipio pertenece a la región de Costa Chica. Se ubica al sureste de Chilpancingo, entre las coordenadas 16° 29’ 53’’ y 16° 45’ 15’’ de latitud norte, y 98° 39’ 16’’ y 98° 50’ 52’’ de longitud oeste. Cuenta con una extensión territorial de 217 km2. Sus colindancias son las siguientes: al norte con San Luis Acatlán, al sur con el océano Pacífico, al este con Azoyú, Juchitán y Cuajinicuilapa, y al oeste con Copala y San Luis Acatlán. Su cabecera municipal, del mismo nombre, se encuentra a 241.6 km de la capital del estado y está a una altitud de 10 msnm.

Historia: Como parte del territorio de Azoyú, Marquelia fue creado el 27 de mayo de 1837, según Decreto de la Junta Departamental de Puebla; Azoyú pertenecía al partido de Ometepec, dependiente del Departamento de Puebla. Desde su fundación se ha dado una lucha del pueblo contra los caciques. En 1936, se reconoce por primera vez esta comunidad, que combatía denodadamente contra el cacicazgo de las familias Engelmo y Maza. En 1940, se expidió la primera resolución agraria del ejido Marquelia, con 1747 ha para ser repartidas entre los campesinos. En 1976 se da la resolución definitiva de la primera ampliación del ejido, repartiéndose otras 637 hectáreas. En febrero de 2001, el gobernador René Juárez Cisneros envía petición al H. Congreso del estado para crear un nuevo municipio; en noviembre del mismo año, la Legislatura aprueba la solicitud y decide que la cabecera esté en Marquelia. En diciembre se publica el Decreto número 413, que autoriza la creación del nuevo municipio. Por último, el 6 de junio del 2002 se aprueba la integración del nuevo ayuntamiento, instituyéndose Marquelia; y el 15 de junio entra en funciones.

Personajes ilustres: Profesor Juan Suástegui Hernández, fue de los primeros maestros que prestaron sus servicios en Marquelia, arribó a la población en 1945 y formó a decenas de generaciones. Otro ciudadano distinguido fue el destacado músico y compositor, Chicho Estrada, quien sin haber nacido en este municipio, estuvo plenamente identificado a través de su popular banda de música.

Monumentos históricos: En la cabecera municipal encontramos un monumento al Benemérito de las Américas, don Benito Juárez.

Suelo: Son por lo general de buena calidad, aptos para la agricultura, sobre todo para la siembra de coco. La tenencia de la tierra comprende un 70% de tierras ejidales, y 30% de pequeña propiedad.

Orografía: El tipo de relieve está constituido por zonas semiplanas y planas. Las primeras ocupan el 55% de la superficie municipal, con alturas máximas de 250 msnm, y se localizan al norte y noroeste del municipio; las zonas planas representan el 45% restante, y se localizan en la parte central, sur y sureste del municipio, con alturas que oscilan entre los 5 y 50 msnm.

Hidrografía: Se localizan los ríos siguientes: Quetzala, llamado también río Grande, ubicado en la parte sureste; río Marquelia o San Luis, que corre sobre la parte poniente del área municipal, marcando el límite con los municipios de Copala y San Luis Acatlán. Existen otros arroyos de menor caudal como Zayotlán, El Zapote, Tila, Arroyo Seco y El Guayabal.

Clima: Es de tipo cálido subhúmedo, con temperatura de 17 °C en la época de frío, que comprende los meses de diciembre y enero. La temperatura máxima, en mayo, alcanza los 36°C, siendo los meses más calurosos los de primavera y verano, presentando lluvias con promedio anual de 1200 mm. Las mayores precipitaciones comprenden los meses de junio a septiembre.

Flora: Está compuesta principalmente por selva baja caducifolia. También hay sabanas con arbustos de huizaches, palo mulato, cubato y cacahuananche. En las partes bajas abundan los cocoteros, platanales y ceibas.

Fauna: La fauna es abundante y variada, destacan la iguana, víbora de cascabel, mazacóatl (mazacuata), tilcoate, paloma, cucucha, gavilán, zopilote, loro, perico, chachalaca, venado, jabalí, mapache, zorro, tlacuache, conejo y diferentes tipos de insectos voladores y rastreros.

Recursos naturales: Aunado a la fertilidad de su suelo, propicio para la agricultura y la ganadería, el nuevo municipio de Marquelia tiene un recurso natural envidiable: sus 18 km de litoral, situación que lo coloca con grandes posibilidades de desarrollo y que, además de incentivar el movimiento económico con la explotación de la fauna marina, en lo cual destaca la Barra de Tecoanapa, también ofrece el atractivo de sus playas para impulsar el turismo. Sus ríos y arroyos constituyen otro renglón importante para el despegue hacia un mejor nivel de vida.

Población: Cuenta con un Total de: 13 730 habitantes; INEGI 2015.

Grupos étnicos: El II Conteo de 2005 registró 287 personas de 5 años y más que hablaban alguna lengua indígena: tlapaneco, mixteco, náhuatl o amuzgo.

Religión: La religión predominante entre la población de 5 años o más, es la católica, con un 98%; el 2% corresponde a otras religiones.

Salud: Se cuenta con 3 establecimientos de primer nivel y una unidad de medicina familiar del ISSSTE; 6 consultorios, 2 salas de expulsión; 5 médicos generales, 12 enfermeras y 5 camas no censables.

Fiestas y tradiciones: La fiesta que se ha hecho tradicional es la coronación de la reina de las fiestas patrias, quien desfila por las calles cada 16 de septiembre, acompañada de un nutrido elenco juvenil que va bailando la danza de Los Apaches. Entre sus festividades religiosas, sobresalen la de Santiago Apóstol, la Santa Cruz, la Virgen de Guadalupe y la Virgen de Juquila.

Turismo: Es una actividad importante para la economía del municipio y sus habitantes, aunque hace falta impulsarla. Tiene atractivos como las playas de Bocana, Las Peñitas, la Ranita y la Barra de Tecoanapa, cercanas a la cabecera municipal y de fácil acceso.

Fuente

Enciclopedia Guerrerense. Guerrero Cultural Siglo XXI, A.C.